La conservación, protección y estudio del Patrimonio Arquitectónico (AH) se basan en el conocimiento completo y la documentación de su compleja morfología, sus componentes arquitectónicos y todos los eventos relacionados con el edificio. Una cuestión clave para la grabación completa de un monumento está relacionada con el proceso de catalogación, que es la acción de registro, descripción y clasificación de los activos del Patrimonio Cultural (CH). Muchas instituciones culturales y organismos nacionales han estado trabajando en el desarrollo de normas para uniformar la documentación, recuperar información sobre el patrimonio cultural, promover el intercambio de datos, mejorar la gestión de contenidos y reducir los esfuerzos redundantes.
Para regular la actividad de catalogación, se definieron reglas, pautas e indicaciones. En particular, los tesauros fueron adoptados para proporcionar, con un vocabulario controlado, estructura y pautas para la estandarización de los términos, evitando la ambigüedad y la subjetividad de la documentación y la pérdida de información importante. Algunos de estos estándares de datos se han definido dentro de un marco nacional, como el esquema ICCD (Italia) o el estándar MIDAS (Inglaterra); otros apuntan a garantizar la interoperabilidad de datos, como, entre otros, LIDO y el esquema CARARE. En este artículo llevamos a cabo una evaluación y comparación de los esquemas y estándares antes mencionados, junto con el esquema adoptado por l'Inventaire général du patrimoine culturel (Francia).
Después de un análisis de la descripción formal de los esquemas de metadatos individuales, realizamos el mapeo de los diferentes esquemas entre sí. El análisis se realiza teniendo en cuenta las directrices de RecorDim para documentar los lugares de CH. Como resultado, Las asignaciones descritas en el documento permiten la interoperabilidad de los datos almacenados de acuerdo con diferentes esquemas de metadatos.
Además, el documento destaca propiedades, equivalencias y deficiencias de los esquemas, confirmando la idea de que se necesita un estándar de documentación más completo para el Patrimonio Arquitectónico.